Hoy viernes, volvemos al mundo de la cocina. Si tienes unos minutos queremos presentarte cómo preparar una riquísima tarta de requesón casera.
Es un postre muy fácil de hacer y os vamos a contar nuestro secreto, ¿cuál es? Muy fácil, consiste en preparar el requesón de forma casera.
El requesón casero
La idea es preparar unos 400 gramos de requesón, así que lo que necesitamos es:
- Dos litros de leche entera, mucho mejor si es fresca.
- Un poco de sal (como tres cuartos de una cuchara de postre).
- Zumo de limón de dos limones.
Se mezclan todos los ingredientes en un cazo y los dejamos reposar media hora.
Ponemos el cazo al horno hasta que hierva y vamos removiendo lentamente.
Cuando hierva, comience a separse el suero del cuajo y se formen dos partes, apagamos el fuego y lo dejamos enfriar dos horas aproximadamente.
Al pasar esas dos horas, lo colamos bien para que no quede nada líquido. Si te gusta el requesón tal cual lo tenemos en este punto, es otro postre que ya tendrías listo para consumir solo, con caramelo, miel, etc.
Pero ahora vamos a utilizarlo para la tarta. También podéis ahorrar los pasos anteriores, comprarlo hecho y comenzar aquí la receta.
Necesitamos:
- 375 gramos de requesón
- 250 gramos de yogur natural
- 3 huevos tamaño L
- 50 gramos de harina de repostería
- 150 gramos de azúcar
- y un poco de mantequilla para el molde.
¡A la cocina!
Si alguna vez preparasteis una tarta de queso, es una receta muy similar.
Cogemos un molde redondo de unos 16 cm de diámetro que podamos meter en el horno posteriormente y lo untamos con un poco de mantequilla.
En un recipiente a parte, troceamos el requesón para batirlo junto con los yogures, los huevos, la harina y el azúcar.
La idea es conseguir una crema fina y homogénea, pero sin que llegue a generar burbujas.
Una vez batido, tapamos el recipiente y lo metemos en la nevera, aproximadamente una media hora, mientras que calentamos el horno a 175ºC.
Una vez que tenemos el horno caliente, añadimos la crema batida al molde con mantequilla, lo introducimos y lo dejamos unos 40 minutos horneando.
Es probable que mientras se hornea crezca e incluso sobresalga del molde, pero al retirarlo del horno bajará, no os preocupéis.
Una vez listo, lo sacamos de horno y lo dejamos reposar. Si os gusta más frío y lo hacéis con tiempo, cuando enfríe podéis volver a meterlo en la nevera.
Presentación:
Nosotros, para darle un toque original a la presentación, lo rociamos con un poco de miel y lo adornamos con unas nueces.
Solo es un consejo, como la siempre la presentación a gusto del consumidor. ¡Solo también esta para chuparse los dedos!